Por: Mariana Díaz
“Freshness Burger es un restaurante de comidas rápidas en Japón. Fundado en 1992, vende hamburguesas, sándwiches, ensaladas, cafés y bebidas. Se anuncia como “fresco y orgánico”, y opera bajo el lema “Comida fresca, servicio fresco, gente fresca, Planeta fresco”. Hay varios productos vegetarianos en el menú y actualmente operan 189 sucursales en Japón y 20 en Corea del Sur”.
La solución planteada por la cadena de comidas japonesas es completamente innovadora y particular ya que resuelve un problema cultural que hasta el día de hoy se ve reflejado en los habitantes del Japón, más específicamente las mujeres. La imagen de belleza femenina en el Japón está basada principalmente en unos personajes del siglo XVIII y XIX llamadas geishas. Una Geisha es una artista tradicional japonesa, cuyas labores constituían, tras un aprendizaje que podía ser tanto desde los 15 años o de la infancia, en entretener en fiestas, reuniones o banquetes tanto exclusivamente femeninos o masculinos como mixtos”. Actualmente por más que el número de geishas ha disminuido hasta ser casi nulo, nos encontramos con comportamientos muy similares en las jóvenes japonesas.
El Ochobo consiste en que la mujer debe tener una boca pequeña y modesta porque esto resulta atractivo y adecuado en Japón, por el contrario tener una boca larga y abierta es considerado feo e indecente, por esto cuando las mujeres japonesas se ríen o abren la boca la ocultan con sus manos. Comer bajo estos parámetros debe ser una tortura para alguien y más si toda una sociedad te está juzgando mientras lo haces.
Esta cadena de restaurantes notó esta costumbre cultural y decidió hacer algo al respecto, liberando las mujeres japonesas de ochobo dándoles la oportunidad de probar las hamburguesas del local. La solución es realmente sencilla, decidieron ocultar la boca del usuario para que esta no se avergüence de tenerla abierta y pueda comer con tranquilidad, para esto el empaque de la hamburguesa es mucho más grande y en el exterior tiene la imagen de una boca cerrada como lo marca la costumbre.
La campaña puede ser algo muy básico, “liberar a la mujer del encanto del ochobo” un simple mensaje detrás de un envoltorio, pero realmente es un gran inicio para reducir las cadenas culturales, ya que al ser Japón un país aún muy machista, este tipo de nuevas formas de actuar reducen la diferenciación social por género y permiten que las mujeres comiencen a sentirse como iguales en un país, además de tener la opción de poder comer tranquilas.
Me parece muy curioso que algo tan sencillo como un envoltorio logre cambiar la forma de actuar de una sociedad tan tradicional como lo es la japonesa veo que en un futuro cada vez más notaremos cómo las tendencias cambiarán para formar personas más libres e independientes en un mundo consiente que siempre busca mejorar con sus habitantes masculinos y femeninos.
Para finalizar me pregunto ¿qué tan fuerte pueden llegar a ser las estrategias de mercado que logran cambiar el mundo?
http://es.wikipedia.org/wiki/Geisha
